Más allá de la metáfora TIEMPO-ES-ESPACIO

El hecho de caminar hacia delante implica que delante de nosotros estén las cosas que experimentaremos en el futuro mientras vamos dejando atrás las cosas que ya hemos vivido en el pasado. Por este motivo, y de acuerdo a la metáfora conceptual TIEMPO-ES- ESPACIO, las personas tienden a situar el futuro delante de sí y el pasado detrás. Ahora bien, ¿esto siempre es así? La Hipótesis del Foco Temporal propone una explicación alternativa sobre cómo representamos el tiempo en el espacio y predice que el hecho de que el pasado o el futuro se representen como situados delante de uno mismo depende de la atención que las personas (y en la culturas) le otorguen al pasado y al futuro. Así, situamos delante de nosotros aquello a lo que le prestamos más atención, por lo que en aquellas culturas donde el pasado es más importante que el futuro (culturas tradicionalistas), habrá una mayor tendencia a situar el pasado delante de sí que en aquellas en las que el futuro es más importante que el pasado (culturas progresistas). En un estudio (Callizo-Romero et al., 2020) pusimos a prueba el alcance de la Hipótesis del Foco Temporal utilizando muestras de 22 grupos culturales o sub-culturales alrededor del mundo que diferían en factores como la lengua, religión o el desarrollo económico. Nuestros resultados indicaron que la atención prestada al pasado versus el futuro (el foco temporal) es un factor central que determina la forma en que las personas piensan en el tiempo en términos espaciales.

Callizo-Romero, C., Tutnjević, S., Pandza, M., Ouellet, M., Kranjec, A., Ilić, S., ... & Santiago, J. (2020). Temporal focus and time spatialization across cultures. Psychonomic Bulletin & Review, 27(6), 1247-1258.